1954-2021
Tenía el talento de Míster Ripley, 1955,
buena edad para mi hermano invisible.
Me lo encontré en la facultad, depredador
de campus y partido, antifranquismo,
mayo francés, movida o democracia;
socio de honor donde yo era de número.
Cumplimos los cincuenta contemplando,
de las Torres Gemelas a las Guerras del Golfo
hasta las tres culturas, a ver quién era
más culto o menos golfo. Tiene un perro
y una hija con una que podría ser su hija.
—¡Qué polvo el de aquel día, camaradas!—
Mitad memoria histórica, mitad amnesia,
aún luce el sí se puede del carro a la alameda.