
EL ORIGEN DE LA LITERATURA
Primero fue la disputa del territorio entre los machos primordiales, los posesivos mío, tuyo y suyo y la propiedad de la tierra, las fronteras, principio del poder y de la desigualdad. El primer invento, que fue el fuego, hizo mejor al hombre, que se quedaba en casa, y el segundo invento, que fue el caballo, lo hizo peor, y el hombre se fue a la guerra. Señores de la guerra y del botín acabaron dueños del apellido y de la herencia, las mujeres definitivamente desposeídas. Escribas y matemáticos iban llevando la cuenta y alguien inventó la primera fábula, que fue la cigarra y la hormiga, base de la literatura, del comercio y de la banca, de la cuestión judía y de las ciudades. El uso de hombre en el sentido de humanidad tiene un límite impreciso desde el momento en que solo nos referimos a los hombres machos, no a los hombres hembra. Añadan que en andaluz y lenguas hispanas seseantes salir de casa y salir de caza se pronuncian igual. Dirán que esto de escribir no tiene sus peligros. Por si acaso, no salga de casa sin Padilla. Pañuelo, dinero y llaves. La prevalencia del género masculino, la fórmula masculino incluye a femenino no debe ser tan simple, cuando hay quien se queja. El tercer invento, por cierto, fue la rueda. Y todos, a correr. Tinta de calamar, 16.
