sapiens y fáber o sapiens y fáberes. Característica de nuestro estado del bienestar, que antes era sociedad de consumo, es el todomando que ejerce una minoría de cargos parasitarios, que, en términos de bienes útiles materiales no hacen nada por el bienestar de la humanidad: reyes, nobles, princesas, rentistas, curas, filósofos, poetas, por citar algunos de los sapiens más logrados. En la periferia, toman asiento oficios liberales por patriotas o sagrados, que algún trabajo toman para merecer el aplauso: militares, políticos, artistas de espectáculos más el breve etcétera que a usted le quepa en la cabeza para el hijo o la hija que ahora está por pasar la selectividad. (Característica fáber es «adorar y adorar, pastores» el belén que los sapiens nos tienen puesto, incluyendo imágenes, ceremonias, fiestas y un calendario de rituales cómo se vive y se muere.)

Visto que a sapiens se llega o por herencia o por carrera, vean el caso de un buen hombre que quiso que vivieran como poetas quienes a él le entraban en la cabeza. ¿Herencia o carrera sobre el oficio de escribir? 

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Texto literalmente copiado en redes:

«Sobre el oficio de escribir:

«Últimamente se ha puesto de moda un tema que desde hace mucho tiempo ha suscitado múltiples controversias: en qué consiste el oficio de escribir. Desde los estudios de Remedios Zafra, y su premiado El informe con el Nacional de Ensayo al libro de la poeta Yolanda Castaño, estos dos libros que buscan dignificar la escritura desde posiciones de poder en el campo literario serían mucho más válidos si sus autoras no gozasen de una posición en la que sí pueden exigir lo que piden, quiero decir, cobrar por todo trabajo o colaboración creativa, más en el caso de Yolanda Castaño.«

«El verdadero núcleo de este oficio está en el 99 por cien de los escritores y escritoras que en nuestro país no pueden vivir de la escritura, veo otros modelos como el estadounidense, tan deficitario en otras cosas, pero que sí permite vivir de la escritura a muchos de sus autores. Como decía, en España la mayoría de los escritores deben trabajar de cualquier otra cosa, con el correspondiente demérito de su obra, poder dedicarse al 100 por cien a la escritura, probablemente haría que muchas de esas escritoras y escritores fueran mucho mejores. Esto trae otro problema, muchas personas dejan de escribir decepcionadas por el sistema injusto y clientelista que se ha apoderado de gran parte de las grandes editoriales españolas. Por no hablar de las luchas de poder entre movimientos literarios y escuelas, que tan bien refleja Remedios Sánchez cuando habla de que en España durante el siglo 20 y 21 ha habido siempre un movimiento dominante y otros opacados por esa escuela. Y qué no decir de los autores isla, aquellos que llevan su independencia hasta las últimas consecuencias, y que pagan con una invisibilidad inmerecida.«

«El campo literario siempre ha sido complicado; sin embargo, la dominancia del capitalismo, primero de plataformas y después el acelerado del turbocapitalismo, crean un ecosistema literario complicado para la literatura.»