TEORÍA DEL SISMÓGRAFO. Ignacio de Loyola, sacerdote vasco y santo, prototipo del noble caballero de la cruz y la espada, fundador de la bulliciosa Compañía de Jesús, privilegiada por bula pontificia del mare magnum, como decir nostrum pero de los siete mares y cinco continentes para la mayor gloria de Dios, aconsejaba a los suyos: no hagáis mudanza en tiempos de mudanza, no os mováis cuando todo se mueva, lo que viene a ser un modo, y seguramente el mejor, de inventar el sismógrafo. Nacido al mundo en Azpeitia la navidad de 1491 y bautizado como Íñigo López de Recalde o Ignacio de Óñez y Loyola, murió en Roma la tarde del 31 de julio 1556 años después de su señor Jesucristo, de quien fue peregrino. Los ángeles del Vaticano repartían ese día propaganda del cielo en vacaciones.
SISMÓGRAFO
Si el movimiento merece,
vibras, lo escribes,
desapareces.
