¿A qué juega quien mezcla Andalucía + soberanía? Dice el dile (antes drae): soberanía. de superanus < super ‘sobre, encima’: Que ejerce o posee la autoridad suprema e independiente. Poder político supremo que corresponde a un Estado independiente.
Termina el argumento del 4 de diciembre en Andalucía y, para mí, que ha sido otro lavado de cara de la poca vergüenza que tiene y ha tenido el andalucismo. Desde Blas Infante, a su Fundación. Desde Rojas-Marcos, a Clavero Arévalo y a Moreno Bonilla. Desde el Partido Andalucista, al Portal de Andalucía.
Y es que el uno de octubre de 2017 Andalucía tuvo ‑y no demostró‑ oportunidad de sumarse a independencia y república que soplaban desde Cataluña. Andalucía y andalucistas callaron, si no dijeron, “a por ellos” dando ánimo a policías contra catalanes independentistas.
El «derecho a decidir» tiene algo que hemos leído en el cuento 35 de El Conde Lucanor o en La fierecilla domada: «Si desde un principio no muestras quién eres, nunca podrás después, cuando quisieres.»
Así creo que el Reino de España dirá a la Andalucía que estuvo con la pancarta en la calle, a su andalucismo airado:
—Si desde el principio no has mostrado lo soberanista que eres, nunca podrás ahora, si no es fingido, y es que lo quieres.